La palabra “aceptación” tan conocida y usada en la sociedad
actual, te ayuda a considerar que algo
está bien, que es bueno o suficiente, según significado en el Diccionario Enciclopédico.
Aceptar, es un verbo tan difícil de aplicar a tu vida, pues
siempre consideras que lo que haces no es suficiente, pero esta insatisfacción
surge, entre otras cosas, debido a que te comparas con otros, quieres tener
logros que otros tienen, quieres verte como otros; pero lo esencial que debes apreciar
de los otros es sólo “lo que hacen bien”,
no fijarte en los logros materiales. A
veces, vives con esas ideas tontas, de estar
en competencia con los demás, de estar codiciando cosas que tú no tienes, te
vuelves obstinado, que no entiendes nada, y por eso no disfrutas de lo que posees.
Como dice Pablo en 1ª.Corintios 13:1,4,5 “…Si no tengo amor,
soy como un pedazo de metal ruidoso; ¡soy como una campana desafinada! El que
ama…No es envidioso…No es grosero ni egoísta…No se enoja de cualquier cosa…No
se pasa la vida recordando lo malo que otros le han hecho…”
Aprende aceptarte y amarte a “ti mismo”. Aceptar que tienes
carencias pero que éstas no impiden tu
crecimiento, no obstruyen tu salud. Muchas veces las enfermedades que padece el
ser humano vienen de estas situaciones, de estos “afanes y defectos” envidias,
egoísmo, estrés, pues el hombre siempre crea necesidades y para que ganes esta
lucha es fundamental que creas en Dios y que El habite en tu vida para que
logres seguridad en ti mismo.
Un paso de avance es que reconozcas tanto tus cualidades
como tus defectos y trabajes con tus debilidades. Recuerda que tu mente y tus
pensamientos juegan un papel importante en tus emociones, por ende aprende a
sanar tu interior, tu alma. Cuando tú te amas a ti mismo puedes aprender a amar
a los demás, a aceptarlos con sus defectos y con sus cualidades.
Dice Pablo en la carta a los Fip.3:18,19 “Hay muchos que
viven como si la muerte de Cristo en la cruz no sirviera de nada… Vive sólo
para comer, y está orgullosa de lo que hace, cuando en realidad debiera de
sentir vergüenza. Sólo piensa en las cosas malas de este mundo”.
Es necesario te esfuerces, te capacites constantemente, la
lectura diaria “la Palabra” ayudará a que adquieras conocimiento y sabiduría y
tomes buenas decisiones en tus momentos difíciles para que avances al logro de
tus objetivos.
Como dice Pablo en la 1ª. Carta a los Corintios 13:13 “Hay
tres cosas que son permanentes, la confianza en Dios, la seguridad de que él
cumplirá sus promesas, y el amor. De estas tres cosas, la más importante es el
amor”.
Como puedes ver, el amor todo lo puede. Imita a la
gente en lo bueno.
Y por último, como dice Pablo en Ef.3:19 “Le pido a Dios que
ustedes puedan conocer ese amor, que es más grande de lo que podemos entender,
para que reciban todo lo que Dios tiene para darles”.
Con Alta Estima,
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