Las advertencias...

Sabes, la advertencia es un acto con el que se llama la atención a alguien especialmente para aconsejarle sobre alguna cosa, así pues Dios le dio otras instrucciones a Moisés para el pueblo israelita.

Así Moisés continuó diciéndoles:

Cuando entren al territorio que Dios va a darles, se encontrarán con que la gente que allí vive,  que tiene costumbres terribles, que no agradan a Dios, practica la brujería y la hechicería cree que puede adivinar el futuro, consultan a los espíritus de los muertos para pedirles consejos, pero ustedes deben obedecer a Dios en todo, y tener cuidado de no seguir el mal ejemplo de esa gente, pues Dios la odia y por eso quiere sacarla de esa tierra. Como ves, Dios advierte en repetidas ocasiones que lo que pronostican los adivinos es engañoso y que te aleja de la presencia de Dios, a veces puedes ver que la gente va con curanderos y santeros pero a Dios no le gustan los hechizos, ni rituales, ni talismanes, ni que visites a los adivinos,  evita hacer todas estas cosas, no despiertes la ira de Dios.

En el país que Dios va a darles, deberán respetar los límites de la propiedad de cada persona.

Que puede darse el caso de un hombre tenga dos esposas, y con las dos tenga hijos, pero ama a una y a la otra no, si su primer hijo lo tuvo con la mujer a la que no ama, cuando haga su testamento deberá dejarle a este hijo, el doble de lo que les deje a sus otros hijos, pues es su hijo mayor, fue el primero en nacer y hacerlo de otra manera sería tratar mal al verdadero hijo mayor.

De que si alguien ve en el camino que un vecino suyo trata de levantar del suelo a un burro echado, debe ayudarlo a levantar el animal, nunca nieguen su ayuda a nadie. Puedes ver que para Dios el amor lo debes demostrar con tus semejantes pues es la fuerza más humilde y a su vez más poderosa que dispone cada persona.

Que Los hombres no deben vestirse como mujeres, ni las mujeres deben vestirse como hombres, a Dios no le gusta ese comportamiento. Dios quiere que el ser humano use el sentido común, que evites los extremos no ser exhibicionista, pues para Dios lo más valioso es lo interno de cada persona.

Que cuando trabajen un campo, no deben arar con un buey y un burro juntos. Por lo que te dice que es importante una sana convivencia con los demás y que llegues a un acuerdo con las personas a tu alrededor, en tu familia, en tu trabajo, en tu escuela para que logres alcanzar tus objetivos y seas más competitivo en todo lo que hagas.

Así como las telas con que se vistan no deben mezclar hilo de lana con hilo de lino. Es conveniente, no comparar a las personas, cada quien viene de un linaje, costumbres, hábitos diferentes, por lo que para lograr un cambio es necesario apegarse a los estatutos de Dios e ir avanzando en el proceso de transformación y refinar actitudes, quitar malos hábitos, afianzar los valores espirituales pero para lograrlo cada personas debe  tomar la decisión voluntaria de hacer lo bueno y lograr un voluntad firme en todo lo que haga.

Que cumplan sus promesas a Dios, el que no promete no comete pecado, en cambio el que promete y no cumple, si comete pecado, Dios castigará a quien no cumpla sus promesas, si alguien, por su propia voluntad le hace una promesa, tiene la obligación de cumplirla. Por lo que puedes ver que debes pensar bien antes de decir algo que te comprometa y que no puedas cumplir, tu palabra como persona es de alto honor y valor y sería bueno tomes conciencia de la magnitud del significado de hacer una promesa, no decirlo a la ligera sino valorar la gran responsabilidad y alcance que tiene ofrecer una promesa a Dios.

Así como cualquiera que se robe a otra persona para venderla o convertirla en esclava, será condenado a muerte. No permitan que en su país se cometa esa maldad.

Que todo pleito entre ustedes debe ser llevado ante las autoridades, para que ellas decidan quién es culpable y quién es inocente, si el culpable merece ser castigado, se le tenderá en el suelo delante del juez, y allí mismo se le darán los azotes que merezca su delito, en ningún caso se le darán más de cuarenta azotes, porque eso ya no sería castigo sino humillación.

Que cuando se trate de comprar y de vender, no hagan trampa sino usen pesas y medidas exactas. Así vivirán muchos años en el país que Dios les dará. Dios odia a los que no son justos y hacen trampa al pesar y al medir. Así puedes ver que a Dios le gusta la honestidad en todo lo que hagas.

Como ves, Dios da instrucciones para llevar una vida bien y próspera en esta tierra, que con tus acciones seas transparente para que irradies luz en todo momento y que es importante tener confianza y fidelidad en Dios.

Con Alta Estima,